"Si hay una constante en todas las fuentes de yoga, esa es su insistencia en el carácter “secreto” de su enseñanza. El secretismo es la forma de salvaguardar la transmisión íntegra y protegerla de contaminaciones externas. Aunque actualmente el acceso a todo tipo de información es libre, rápido y cómodo, el carácter secreto del yoga sigue estando vigente. Cabe distinguir entre “información”, a la cual se puede acceder de manera casi ilimitada, y “conocimiento”, cuyo acceso está tan restringido hoy como siempre lo ha estado. En la tradición india, el conocimiento es un bien que se merece y conquista, no un derecho que tienen todos los hombres por igual, a modo de como se entiende en el mundo moderno. Tradicionalmente, el acceso a los textos clásicos estaba restringido a iniciados en yoga, principalmente porque su comprensión dependía directamente de su práctica. De esta forma, se evitaban malas lecturas manteniendo la escritura en secreto. Actualmente, casi todo el mundo puede tener acceso a la lectura de estas obras o a alguna de sus traducciones. Sin embargo, de todos los que tendrían acceso a la lectura, verdaderamente muy pocos se interesarán por las obras, y de esos, otros pocos las leerán. De esos escasos lectores, alguno será practicante de yoga. Y de esos practicantes, quizá alguno llegue a comprender su contenido. De esta manera, se puede entender que la restricción de este tipo de textos sigue siendo la misma que cuando fueron redactados por primera vez. La única diferencia es que tradicionalmente se evitaban las lecturas inapropiadas a través del secretismo, y en el mundo moderno, el libre acceso a la información propicia que algunos confundan “información” con “conocimiento”. Más allá de esas distinciones, el conocimiento verdadero sigue estando protegido como siempre lo estuvo." - José A. Offroy Arranz

viernes, 7 de febrero de 2014

TANTRALOKA - Abhinavagupta - part 2


BHAIRAVASTAVA
(HIMNO A LA GLORIA DEL ABSOLUTO)

1.- Con el pensamiento idéntico a Ti, en mi corazón rindo pleitesía (me abandono en cuerpo, palabra y pensamiento) al Señor Bhairava, refugio del que no tiene Señor. Hecho de Consciencia, único, infinito, sin origen, El impregna la diversidad de los seres móviles e inmóviles.

2.- ¡Oh gran Soberano! Por la energía de Tu gracia, este universo entero se me presenta desde ahora como idéntico a Ti. Tu eres eternamente mi propio Ser; así la totalidad de las cosas son para mi idénticas al Ser.

3.- En Ti, Señor, mi propio Ser, que penetras todo, el miedo de la transmigración ya no tiene razón de ser, incluso cuando subsistiesen realmente una multitud de actividades forjando terrores, desorientaciones e intolerables dolores.

4.- Oh Exterminador, no pongas sobre mi esa mirada cargada de una espantosa cólera, sobre mí en quien adoración y contemplación del Señor confieren una inmutable estabilidad, sobre mí que soy idéntico a la energía de Bhairava el destructor (de la ignorancia).

5.- Así las espesas tinieblas son dispersadas por los rayos del Tu Consciencia cuando Tu te acercas, Señor! Ya nunca más temeré las artimañas demoníacas del exterminador, de Yama (divinidad de la muerte), ni de la muerte ¡Gloria a Ti!

6.- Yo, Realidad misma del conjunto de objetos contemplados en tanto que irradiación de la verdadera Consciencia manifestada, es en Ti donde yo accedo al apaciguamiento, en Ti, el Ser colmado a profusión por el supremo néctar de todas las cosas.

7.- Oh Señor, cuando el estado de impureza dispensador de excesivos tormentos entra en el campo de mi pensamiento, en ese mismo instante surge de mi la lluvia del supremo néctar que celebra la alabanza de Tu unicidad.

8.- Si, oh Shiva, ascesis, baños, alabanzas, dones, rompen el tormento de la existencia, el dichoso cuidado de Tu revelación extiende en el corazón una marea de felicidad.

9.- Oh Señor Bhairava, esa Consciencia mía, danza, canta, se regocija grandemente, porque desde que ella ha tomado posesión de Ti, el Bienamado, la realización del sacrificio único, el de la igualación, tan arduo para algunos, para ella es fácil.
Durante la quincena lunar sombría, el décimos día del mes Pausa, en el año 68, Abhinavagupta compuso esta alabanza según la cual el omnipresente por compasión apacigua instantáneamente en el ser humano la dolorosa quemadura inherente al desierto del devenir.

                                                                       ANUTTARÂSTIKÂ
(OCHO ESTANCIAS SOBRE LO INCOMPARABLE)

1.- Aquí no hay ninguna necesidad de progreso espiritual ni de contemplación, ni de habilidad de discurso, ni de preguntas, ninguna necesidad de meditar, ni de concentrarse, ni de ejercitarse en las plegarias murmuradas. ¿Cuál es, dime, la Realidad última absolutamente cierta? Escucha esto: no tomes ni dejes, tal que tu eres (en el Ser real, no en el «yo sicológico»), disfruta gozosamente de todo.

2.- Desde el punto de vista de la Realidad absoluta, no hay transmigración. ¿Como entonces puede haber obstáculos para los seres vivos? Puesto que el ser libre no ha tenido nunca obstáculos, intentar liberarlo es tarea vana. No hay ahí más que la ilusión de la sombra imaginaria de un demonio, la cuerda tomada por la serpiente que produce una confusión sin fundamento. No rechaces nada, no cojas nada, bien establecido en ti mismo, tal que tu eres (en cuanto Consciencia, no como «yo sicológico»), pasa el tiempo agradablemente.

3.- En lo Inexpresable, ¿qué discurso puede haber y que camino diferenciaría adorado, adorador y adoración? En verdad ¿para quién y cómo un progreso se produciría, o incluso quién penetraría por etapas en el Ser? ¡Oh Maravilla! Esta ilusión, aunque diferenciada, no es otra que la Consciencia sin segundo. ¡Oh! Todo es esencia muy pura vivenciada por uno mismo. Así, no te crees preocupaciones inútiles.

4.- Esta felicidad no es como la borrachera de vino o la de las riquezas, ni incluso semejante a la unión con la amada. La aparición de la Luz consciente no es como el haz de luz que da una lámpara, el sol o la luna. Cuando uno se libera de las diferenciaciones acumuladas (cultivadas desde el pasado), el estado de dicha es una alegría comparable al liberarse del peso de un fardo, la aparición de la Luz es la adquisición de un tesoro perdido: el ámbito de la universal no-dualidad.

5.- Atracción o repulsión, placer y dolor, levantarse y acostarse, exaltación y abatimiento, etc., todos estos estados de los que participan las formas del universo se manifiestan como diversificados pero en su naturaleza ellos no son distintos. Cada vez que tu coges la particularidad de uno de esos estados, atento enseguida a la naturaleza de la Consciencia como idéntica a ese estado ¿por qué , lleno de esa contemplación, no te regocijas?

6.- La efectividad de lo que existe actualmente no existía antes; de manera súbita, en efecto, surgen siempre las cosas en este mundo (a cada instante). ¿A qué realidad pueden ellas pretender, así mezcladas por la confusión deformante del estado intermedio? ¿Qué realidad hay en lo irreal, lo inestable, lo falsificado, en un amontonamiento de apariencias, en el error de un sueño? Permanece fuera de la imperfección propia a las angustias de la duda y despiértate.

7.- Lo Innato no puede estar sujeto a la marea de las manifestaciones de objetos; estos no se manifiestan más que al experimentarlos tú. Aunque, por naturaleza, estén privadas de realidad, en un instante, a causa de un error de percepción, estas manifestaciones parecen formar parte de lo real. Así brota de tu imaginación la grandeza de este universo puesto que no existe otra causa para su aparición. Es por eso, por Tu propia gloria, que Tu resplandeces en todos los mundos y, aunque único, Tu eres la esencia de lo múltiple.

8.- Cuando surge la Consciencia en tanto que contacto inmediato con uno mismo, entonces lo real y lo irreal, lo poco y lo abundante, lo eterno y lo transitorio, lo que está manchado por la ilusión y lo que es la pureza del Ser, aparecen radiantes en el espejo de la Consciencia. Habiendo reconocido todo esto a la luz de la esencia, Tu cuya grandeza está fundamentada en Tu experiencia íntima, goza de tu poder universal.

 PARAMÂRTHADVÂDASIKÂ
(DOCE ESTANCIAS SOBRE LA REALIDAD SUPREMA)

1.- Degusta permanentemente la paz y abstente del perpetuo parloteo vano, evitando las expresiones «quien eres tu, porque, como, que es esto» que obstruyen el camino. Lo que se revela entonces como la luz que ilumina las distinciones entre existencia y no-existencia, es la manera de ser sin fisura, el Vacío, el ámbito de Shiva la Realidad, el supremo brahman. ¿Qué aprehensión objetiva se revelaría de ahí? (que concepto podría surgir ahí, no pudiendo ningún concepto reflejar ese estado)

2.- Una vez apartado lo irreal (lo inexistente), lo real (lo existente) a lo que accedes es a su vez la realidad. Irreal o real, ¿no es a eso Real mismo (la Conscienciaa lo que tu eres idéntico?

3.- Dices tu: «Toda manifestación es independiente y no debida a la Luz de la consciencia», pero entonces ¿si esta diferenciación ella misma se manifiesta, no se manifiesta ella también en la Luz? Abandona entonces la tendencia a dividir esta división. Si en el transcurso de un sueño, uno sabe que es un sueño, no se experimenta temor cuando se recibe una cuchillada, cuando uno se ahoga, se quema o queda encerrado, porque eso no es ahí mas que un juego.

4-5.- Cualesquiera que sean las cosas que se hagan bajo la inclinación del conocimiento y de la actividad, dime ¿en que se distinguen de lo inconsciente? Y si lo inconsciente vibra también ¿no forma parte del ámbito de la Consciencia sin dualidad, ilimitada, eterna, y que, eminentemente real, escapa a toda captación racional? Si eres Tu el que manifiestas las cosas ¿cómo la ilusión se extendería por su intermediación? Y si las cosas manifiestan esta ilusión ¿no es gracias a Ti? Lo que importa aquí, en esta objetividad, es que Tu expansión (expresión) permanece indivisa. Si no (si tu no eres el que manifiesta las cosas), las cosas no tienen existencia. En los dos casos no se puede plantear una existencia objetiva distinta de la Consciencia. Tu grandeza siempre satisfecha, espontánea, que nada restringe, que pulveriza el error, ¡oh maravilla! ¡Tu permaneces perpetuamente iluminado!

6.- ¡Vuelve tu mirada hacia el exterior pasando más allá del sendero de lo visible! (eso dices tu) ¡Vamos! Se trata de ese engaño que puede parecerse a bhairavîmudrâ (una práctica preparatoria): el cielo de la Consciencia libre de dualidad no está ni en el exterior ni en el interior, el ámbito de la expansión no les deja lugar.

7.- Todo aquello que se revela cuando la marea de impresiones se derrama con vehemencia (impresiones como el terror, la sorpresa, la cólera...) es ahí mismo donde debes de mirar con intensidad: si tu apareces y apareces una y otra vez al comienzo, en medio y al final ¡el universo diferenciado se disolverá!

8.- La confusión se hace más densa cuando uno se preocupa de dudas relativas al dolor. Los obstáculos, debidos a los errores surgidos al mismo tiempo que su causa, determinan su extrema variedad. Se la compara (la confusión) a la fortaleza de los gandharva. Si la confusión no se manifestase en el firmamento de la Consciencia -receptáculo de la alternativa dualismo y no-dualismo- ¿en que otro lugar brillaría y cual sería su último refugio; ella (la confusión) cuya esencia es la multiplicidad?

9.- Esta marea de impresiones, verdaderamente irreal durante el sueño, en el estado de sueño profundo no se manifiesta; ¿cómo podríamos captar ese flujo de impresiones en el firmamento de la Consciencia sin límite y más allá de estos estados (en el cuarto estado; turya)?
Si Tu dices que incluso en la vigilia, el conjunto de objetos como la tierra existen, ahí entonces, ocurre que gracias al Conocimiento, si esta marea llega a su fin, en un instante y en el lugar que sea, el conjunto (de objetos) no aparecerá ya más separado de la Consciencia, así ¿cómo en la vigilia, la Consciencia podría estar dividida?

10.- Cualesquiera que sean las apariencias manifestadas a la Consciencia, son percibidas en Mi, supremo firmamento; porque esos rayos que están en las apariencias (en su especificidad), es en Mi que brillan indiferenciados en el Esplendor eterno. Y esta Luz consciente ilimitada, autónoma, verdadera, infinita, sin imperfección, eterna, espontánea, que dispersa las tinieblas formadas por dos enemigos irreconciliables: (dualismo y no-dualismo) ¡esa Luz soy yo!

11.- Que el tiempo suscita las parcelas temporales acumulándolas; que el Creador crea con pasión, o que el Dios del amor sacude intensamente el corazón humano según las prescripciones de Shiva, de quien depende; que este bullicio de juego divino que tiene como único refugio el cielo constituye las fases sucesivas que llevan a la revelación del Ser; o que el refugio sea el cuerpo, etc... ¿no es en la gran ilusión del cambio universal donde yo percibo todo ello?

12.- ¡Eh, quien sea! Que yo lo devoro. ¡Eh, quien sea! Que lo mato acto seguido. ¡Eh, alguien! Que yo lo bebo ¡yo que estoy ebrio de haber ingerido el vigor supremo de la suprema Consciencia! (al ser la Consciencia, soy el actor en el teatro del universo)
Shiva el león, Dios encantador, habiendo accedido a la mayor de las satisfacciones paseándose en los bosques impenetrables de su propio ámbito, ha hecho bramar al elefante de esta vil diferenciación. Su aparición fulgura para los seres sagaces que han llegado a las cimas del Despertar al mismo tiempo que pone en fuga a los malos -los chacales- y que disipa el miedo inherente a la existencia.

No hay comentarios: